De: Acento.com.do
SANTO DOMINGO, República Dominicana.- La mediana y pequeña industria del país exigió al próximo gobierno que resulte de las venideras elecciones presidenciales ejecutar de inmediato una revolución productiva que tenga como norte una amplia generación de riquezas a través del empleo decente, las exportaciones y la repotenciación del mercado interno.El planteamiento fue hecho por la Asociación de Empresas Industriales de Herrera y Provincia Santo Domingo (AEIH), al señalar que durante décadas el sector ha estado a la espera de una transformación sustancial en la industria de la mano con el fortalecimiento institucional.
Sostuvo que aunque se han dado pasos importantes para dinamizar la industria –como la Ley de Innovación Industrial que creó a ProIndustria y los esfuerzos desde el Centro Nacional de Competitividad (CNC), todavía queda un largo trecho por recorrer para un sector que, pese a estar abandonado a su suerte, contribuye con un 35 por ciento al Producto Interno Bruto (PIB), aporte el 34 por ciento de los ingresos fiscales y genera el 38 por ciento de los empleos.
En ese contexto, la entidad empresarial presidida por Wadi Cano Acra, definió como retos inaplazable la puesta en marcha de la Mesa Presidencial de las Exportaciones –un compromiso asumido en la Cumbre de Desarrollo- simplificar los trámites y la permisología para poner en operación las empresas y hacer del cumplimiento con el fisco un ejercicio menos gravoso.
Planteó que ningún cambio positivo es posible en la industria si no es resuelto definitivamente el problema eléctrico, por lo cual sugirió continuar el proceso de mejora a través de la erradicación definitiva de la influencia política en el sector, la reducción de las pérdidas técnicas y no técnicas, el cambio de la matriz de generación y la colocación de medidores a todos los usuarios.
Otro factor fundamental para el despegue de la manufactura local es, de acuerdo con a AEIH, garantizar el financiamiento a largo plazo y a tasas de interés razonables, por lo cual favoreció una reforma estructural en las entidades estales especializadas en créditos, que implique la unificación de las políticas de préstamos al sector productivo del Banco de Reservas, el BNV, el Banco Agrícola y otros.
En términos institucionales, la AEIH pidió que las entidades públicas se conviertan en facilitadoras de la industria y, en ese sentido, pidió crear una verdadera ventanilla única en la que se realicen todos los trámites oficiales vinculados con la industria.