SANTO DOMINGO, República Dominicana.-Los jueces del Primer Tribunal Colegiado, que preside Gissel Méndez, condenaron este miércoles a 30 años de cárcel a los acusados de asesinar al teniente coronel César Augusto Ubrí Boció, quien era asistente del presidente de la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD), mayor general Rolando Rosado Mateo.
La decisión fue adoptada tras encontrar culpables a Wáscar Antonio Cavallo y Michael Valdez Castillo de violar los artículos 256, 266, 295, 304, 379 y 382 del Código Procesal Penal Dominicano, que tipifica los crímenes de asociación de malhechores y homicidio voluntario acompañado de robo con violencia en perjuicio de Ubrí Boció.
El tribunal también impuso la indemnización ascendente a diez millones de pesos en favor de los familiares del oficial asesinado.
Lucía Ubrí Boció, hermana de la víctima, expresó "Nosotros nos sentimos conformes como ha actuado la justicia, pero no nos devolverán nunca a mi hermano".
En la sentencia establecen que los hoy condenados deberán cumplir la condena, Cavallo Montero, en Najayo, San Cristóbal y Valdez Castillo en La Victoria.
El 18 de septiembre en horas de la noche Ubrí Boció, en aquel entonces, asistente del mayor general de la Policía Nacional, Rolando Rosado Mateo, presidente de la Dirección Nacional de Control de Drogas, se encontraba estacionado en una calle del sector de Las Praderas conversando con su compañera de trabajo, Yocasta Maríñez Madera, cuando fue sorprendido por los hoy condenados.
Maríñez Madera, quien fungió de testigo en el juicio de fondo, señaló a Cavallo Montero como la persona que disparó al oficial.
