SANTIAGO, República Dominicana.-Cientos de santiaguenses y ciudadanos de otras ciudades de la región Norte convirtieron el domingo los alrededores del Monumento a los Héroes de la Restauración en una zona de libertad para reclamar derechos y gritar su indignación contra la reforma tributaria, cuya ley.
Desde las 2:00 de las tarde, una multitud desafío la lluvia para unirse a una manifestación pacífica que se extendió hasta pasadas las 7:00 de la noche, con una caminata que se hizo sentir en las avenidas Francia, Las, Carreras, Juan Pablo Duarte, y las calles, Del Sol, RC Tolentino, Beller y otras, en la parte alta del centro urbano de Santiago. La zona copada por decenas de negocios de comidas, bebidas y entretenimiento pasó a ser el escenario para el reclamo de derechos ciudadanos.
Los manifestantes, entre los cuales se identificaron activistas de sectores populares, comunitarios, políticos de grupo de izquierda y representativos de la clase media y media alta de Santiago y la región norte, expresaron su rechazo al paquete tributario y exigieron que se lleve a los responsables del déficit a la cárcel.
Entre los activistas abundaron las quejas en contra de las acciones policiales para repeler las protestas. Los jóvenes improvisaron consignas en las que referían que estaban armados, pero no con armas, sino con valor
“¡No es una reforma, es una traición, quieren que paguemos por la corrupción!”, “¡A la cárcel los corruptos!”. Con estas expresiones los manifestantes se quejaron de la imposición de la reforma tributaria, la cual ya entró en vigencia, sin que gran parte de la población esté enterada de sus efectos.
La actividad en la plaza monumental concentró a personas de todas las edades, pero fundamentalmente tuvo a decenas de jóvenes como la parte motivadora de las protestas, cantando, bailando, aplaudiendo, arengando a los presentes con consignas.
Banderolas, camisetas, carteles, contenían mensajes alusivos al rechazo a la reforma, la cual la población considera fue cocinada en Congreso Nacional, sin oportunidad de muchos debates, como ya se ha hecho costumbre en las dos gestiones del presidente de la Cámara de Diputados, Abel Atahualpa Martínez Durán (Ruby), nativo de Hato Viejo-Monción, Provincia Santiago Rodríguez, pero diputado por Santiago de los Caballeros.
En la manifestación, los activistas identificaron a quienes consideran son los responsables del déficit de RD$ 187 mil millones.
El primero de los señalados es el ex presidente Leonel Fernández Reyna, además presidente del Partido de la Liberación Dominicana (PLD), seguido de su hombre de confianza, secretario de Organización del PLD, senador de San Juan, Félix Bautista, criticado, entre otras cosas, por el escándalo de los US$ 130 millones, del contrato Sun Land, que costó caro a los bolsillos del pueblo dominicano sin autorización del Congreso Nacional.
Los manifestantes fueron vigilados muy de cerca por patrulleros de la Policía Nacional, que se movilizaron en toda la caminata y la concentración del grupo, que tuvo como centro la estatua del general restaurador Gregorio Luperón, en la calle Daniel Espinal, en el lado Este del Monumento.
Las protestas de este domingo incluyeron una parada frente la Oficina Senatorial, donde se le hizo un llamado a la reflexión al senador de Santiago, Julio César Valentín, quien es además parte de los privilegiados del Comité Político del partido gobernante.
Tras dos caminatas, los manifestantes lograron llamar la atención de decenas de personas algunas se sumaron a las protestas, otras tomaban fotos y filmaban en sus equipos telefónicos, para ponerlas en las redes sociales, centro de la difusión de las quejas de todos los sectores contra la política del Gobierno.
Al culminar las actividades, los organizadores del acto cívico llamaron a un minuto de silencio por el asesinato del estudiante Willy Florián Ramírez, de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD), acribillado a tiros por un agente de la Policía el pasado jueves, 8 de noviembre.
Entre los activistas abundaron las quejas en contra de las acciones policiales para repeler las protestas. Los jóvenes improvisaron consignas en las que referían que estaban armados, pero no de armas, sino de valor.
Hasta el momento no se ha escuchado en Santiago la primera voz en apoyo a la reforma tributaria. La población se ha divido en dos, los que protestan, que son la mayoría y una minoría que calla, ante la situación de precariedad económica que se espera acarreé el paquetazo tributario.
