Fuente: SNTP
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La Federación Internacional de Periodistas (FIP) se une al Sindicato Nacional de los Trabajadores de la Prensa (SNTP) en el reclamo ante los asesinatos del reportero gráfico Newton González, asesinado el 1º de Julio de 2014, y del periodista Blas Olivo, muerto el 12 de abril del presente año, requiriendo a las autoridades correspondientes la toma de las medidas necesarias para evitar que estos hechos queden en la impunidad.
El periodismo latinoamericano ha tenido que lamentar en el curso del último año el recrudecimiento de la violencia contra los trabajadores de medios en República Dominicana y una peligrosa impunidad en la búsqueda de responsables: el crimen del reportero gráfico Newton González aún no tiene identificados los autores materiales y dos de los nueve acusados de participar en el asesinato de Blas Olivo fueron muertos en circunstancias que no están del todo esclarecidas.
También resulta alarmante la situación de amenazas que sufren los periodistas: el 2 de marzo de este año, la FIP repudió las amenazas de muerte hacia los periodistas Huchi Lora, Juan Bolívar, Roberto Cavada y Amelia Deshamps dadas por agrupaciones neonacionalistas por sus opiniones y coberturas periodísticas (más información en el siguiente link).
A estos hechos, tal como ha declarado José Beato, Secretario General del SNTP, se suman “El supuesto robo perpetrado en la vivienda del polémico Periodista del programa el Despertador que se produce por Color Visión canal 9, Marino Zapete en su vivienda y la agresión a tiros a la reportera de televisión Celina Suriel, supuestamente por la delincuencia común”, hechos que, como señala Beato “Pudieran interpretarse como acciones de represión e intimidación contra periodistas y otros trabajadores de los medios”.
La Federación Internacional de Periodistas, celebra los esfuerzos del SNTP en monitorear los procesos judiciales de los asesinos de los periodistas, a la vez que se suma a su afiliado nacional en exigir la mejora de las condiciones de seguridad de los trabajadores de prensa y una pronta resolución de los asesinatos de Newton González y Blas Olivo
